Pezeshkian busca diálogo nuclear con Estados Unidos
La Nueva Perspectiva del Presidente Irání: Un Llamado a la Diplomacia
Un Nuevo Enfoque en las Relaciones Internacionales
El reciente ascenso de Masud Pezeshkian como presidente de Irán ha traído consigo un cambio notable en la postura del país hacia Estados Unidos. En su primera conferencia de prensa desde que asumió el cargo el 31 de julio, Pezeshkian mostró un interés renovado en establecer conversaciones directas con Washington. Sin embargo, este acercamiento no es sin condiciones. El presidente iraní ha manifestado que tales diálogos dependen de que Estados Unidos demuestre que no tiene una actitud hostil hacia Irán, lo que plantea interrogantes sobre la sinceridad de este nuevo enfoque.
Condiciones para el Diálogo
La disposición de Pezeshkian a reanudar las negociaciones está íntimamente ligada a uno de sus compromisos de campaña: aliviar las sanciones económicas impuestas por Occidente. Este alivio está condicionado a la reactivación del acuerdo nuclear de 2015, que fue diseñado para permitir la supervisión internacional del programa nuclear iraní. La intención de este acuerdo era asegurar que Irán no desarrollara armas nucleares, un tema que ha sido motivo de gran preocupación a nivel global.
El Impacto de las Sanciones
El contexto de estas negociaciones se remonta a 2018, cuando el gobierno de Donald Trump decidió retirarse unilateralmente del acuerdo conocido como el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA). En ese momento, Irán cumplía con todas las estipulaciones del acuerdo, que había sido firmado por varias potencias mundiales, incluidas Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania. La retirada de Estados Unidos y el restablecimiento de sanciones severas han tenido efectos devastadores en la economía iraní. Según expertos, la combinación de estas sanciones y la corrupción interna ha llevado a que el número de personas en situación de pobreza en Irán se duplicara entre 2020 y 2021.
Intentos de Negociación bajo una Nueva Administración
Desde que Joe Biden asumió la presidencia en Estados Unidos en 2021, ha habido intentos de renegociar el acuerdo nuclear. Sin embargo, Irán se ha mostrado reacio a negociar directamente con Washington, prefiriendo mantener contactos a través de intermediarios europeos y países árabes. Esta estrategia ha generado un ambiente de desconfianza que complica aún más las relaciones entre ambos países.
La Respuesta del Régimen a las Protestas
En un contexto de creciente descontento social, el régimen iraní ha calificado las manifestaciones populares como “disturbios”. En 2021, miles de personas, en su mayoría mujeres y jóvenes, salieron a las calles exigiendo el fin del régimen islámico. La respuesta del gobierno fue brutal, resultando en la muerte de al menos 551 personas y la detención de 60,000. Según informes de la ONU, esta represión ha profundizado la brecha entre el pueblo iraní y su gobierno, una desconexión que se ha evidenciado en los altos niveles de abstención electoral desde 2020.
Un Presidente Leal a la Causa
Pezeshkian, quien se identifica con una facción reformista dentro del régimen, ha manifestado su creencia en que es posible cambiar el sistema desde dentro. En su reciente conferencia, se aseguró de situar sus propuestas de diálogo con Estados Unidos en el marco de las visiones del líder supremo de la revolución. Esta alineación sugiere que cualquier movimiento hacia la diplomacia tiene que contar con el respaldo de las autoridades más altas del país.
La Influencia de Zarif en el Nuevo Gobierno
La inclusión de Mohammad Javad Zarif, el exministro de Asuntos Exteriores y figura clave en la elaboración del acuerdo nuclear de 2015, como vicepresidente de Asuntos Estratégicos en el equipo de Pezeshkian, también resalta la intención de mantener un enfoque diplomático. Zarif es conocido por su habilidad en las negociaciones y su presencia podría ser un indicativo de que el nuevo presidente cuenta con el apoyo necesario para llevar a cabo sus planes.
Desafíos Económicos y la Necesidad de Inversiones
En su discurso, Pezeshkian abordó la necesidad urgente de mejorar la economía iraní. Hizo hincapié en que es fundamental resolver la situación relacionada con el GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional), así como avanzar en las negociaciones del JCPOA. Según él, la creación de empleo y la atracción de inversiones son cruciales para el futuro del país. Este enfoque en la economía sugiere que, aunque el régimen está dispuesto a reanudar las conversaciones sobre el acuerdo nuclear, el tema de la ideología y el velo sigue siendo un pilar inamovible.
La Visión a Futuro
La postura de Pezeshkian indica que el régimen iraní está buscando formas de mejorar su situación económica a través de la diplomacia. Sin embargo, es evidente que los problemas internos y las tensiones sociales continúan representando un gran desafío. La propuesta de diálogo con Estados Unidos podría ser vista como un intento de desviar la atención de las crisis internas, mientras que el régimen se aferra a su narrativa oficial que atribuye el descontento popular principalmente a factores económicos.
Soy Lucía Ramírez, reportera enfocada en Economía Global, Medio Ambiente y Bienestar. He viajado por el mundo analizando cómo las tendencias económicas afectan a diferentes culturas y ecosistemas. Mi trabajo en Versi busca dar voz a las historias menos contadas, aquellas donde la economía y el medio ambiente se encuentran con el bienestar humano, ofreciendo una visión global que conecta estos aspectos vitales de nuestra vida cotidiana.
