Avances en la Energía Nuclear: Oklo se Prepara para Construir su Primer Microreactor

Progreso Hacia la Construcción

En un reciente anuncio, Oklo, una empresa emergente en el sector nuclear, ha dado un paso significativo hacia la construcción de su primer microreactor comercial. El CEO de la compañía, Jacob DeWitte, compartió información con un medio de comunicación sobre cómo han recibido la aprobación del Departamento de Energía de los Estados Unidos para realizar investigaciones en el sitio donde se planea construir el reactor, ubicado en el Laboratorio Nacional de Idaho en Idaho Falls. Este avance se considera crucial para preparar el terreno para las actividades iniciales de construcción.

DeWitte mencionó que las investigaciones se centrarán en aspectos como la planificación de la infraestructura, encuestas ambientales y evaluaciones geotécnicas. Esto sienta las bases para las actividades de preparación del sitio, que son esenciales antes de que se inicie la construcción real. Se espera que Oklo comience la construcción en el sitio de Idaho en 2026, con la ambición de tener el reactor operativo para 2027.

Desafíos Regulatorios

A pesar de estos avances, Oklo aún enfrenta obstáculos significativos. La Comisión Reguladora Nuclear (NRC) debe otorgar su aprobación para la construcción y operación de la planta, después de que su primera solicitud fuera rechazada en 2022. DeWitte ha reconocido que existe un riesgo de que la fecha de inicio de 2027 se retrase, dependiendo de cuánto tiempo tome la revisión por parte de la NRC.

La primera solicitud de licencia fue rechazada debido a la falta de información sobre la seguridad, algo que DeWitte atribuyó a las interrupciones causadas por la pandemia de Covid-19. La empresa presentó su solicitud justo cuando la Organización Mundial de la Salud declaró la pandemia, lo que complicó el proceso de revisión.

La Demanda de Energía y el Futuro de Oklo

Oklo tiene la intención de construir, operar y vender energía directamente a sus clientes mediante contratos a largo plazo. La demanda eléctrica está proyectada para aumentar considerablemente en los próximos años. Los microreactores de la compañía, conocidos como Aurora, están diseñados para ser más pequeños y simples, con capacidades que van desde 15 megavatios hasta 100 megavatios o más. Para poner esto en perspectiva, el reactor nuclear promedio en la flota actual de EE. UU. tiene alrededor de 1,000 megavatios.

DeWitte subrayó que el reinicio de la planta de Three Mile Island es una prueba de que el sector tecnológico está reconociendo la importancia de asegurar un suministro energético seguro. Observó que las grandes empresas tecnológicas están buscando asegurar una gran capacidad de plantas existentes, lo que tiene sentido dado que esto puede ser la opción más inmediata para la entrega de energía.

Sin embargo, el CEO también destacó que la industria nuclear ha tenido un desempeño deficiente en satisfacer el interés del mercado. Según él, la oferta de productos, el modelo de negocio y la capacidad de ejecución de la industria han sido insatisfactorios. Esto ha creado la necesidad de un cambio disruptivo en el sector.

Retos Internos de Oklo

A pesar de su visión optimista, Oklo ha enfrentado desafíos internos. La NRC rechazó su primera solicitud de licencia debido a la falta de información sobre la seguridad. La empresa planea presentar su solicitud nuevamente en 2025 y actualmente se encuentra en un proceso de revisión previa.

DeWitte ha señalado que la denegación de la primera solicitud se debió a las dificultades que trajo la pandemia. La falta de auditorías en persona complicó la comunicación y resultó en información faltante en su solicitud. Reconoció que el proceso de revisión de la NRC podría retrasar el inicio de 2027 para el microreactor de Idaho, ya que no tienen control sobre el cronograma de revisión de la NRC.

Oportunidades con la Ley ADVANCE

Oklo podría beneficiarse de la Ley ADVANCE, que se ha promulgado recientemente y que instruye a la NRC para acelerar las decisiones sobre las solicitudes de licencia para construir y operar reactores. DeWitte ha indicado que el éxito de su negocio no depende de cuándo se active la planta de Idaho. La compañía ha recibido un interés significativo en forma de cartas de intención de clientes potenciales, con un aumento del 93%, pasando de 700 megavatios en julio de 2023 a 1,350 megavatios en la actualidad.

El CEO ha expresado su ambición de poner en marcha varias plantas anualmente a partir de 2028. La estrategia de Oklo se centra en escalar su cadena de suministro para satisfacer la creciente demanda.

Adaptándose a las Necesidades del Mercado

Los microreactores de Oklo son ideales para centros de datos, que suelen tener necesidades energéticas de menos de 50 megavatios, un tamaño que se alinea con la capacidad de sus plantas. DeWitte ha comentado que la capacidad de los reactores para reciclar combustible ayudará a diversificar su cadena de suministro, aunque el combustible reciclado no estará disponible en cantidades significativas hasta 2029 o más allá.

Desafíos en el Abastecimiento de Combustible

El abastecimiento de combustible nuclear ha sido un gran desafío para Oklo. En mayo, el gobierno de EE. UU. prohibió las importaciones de uranio de Rusia, que representaba aproximadamente el 35% de las importaciones de combustible nuclear del país. La administración de Biden está invirtiendo $2.7 mil millones para establecer la producción nacional de uranio. Oklo tiene un acuerdo con Centrus Energy, un proveedor de combustible nuclear con sede en EE. UU., que comenzó operaciones de enriquecimiento en Piketon, Ohio, en octubre pasado. Sin embargo, la cadena de suministro nacional aún no produce a la escala necesaria en la actualidad.

A pesar de estos desafíos, Oklo ha asegurado el combustible necesario para su planta en Idaho, lo que es un paso crucial para avanzar en su proyecto.

Perspectivas Financieras de Oklo

Hasta el momento, Oklo ha registrado una pérdida neta de $53 millones durante los seis meses que terminaron el 30 de junio. La compañía aún no ha generado ingresos, algo que solo ocurrirá cuando comience a producir energía en su primera planta. DeWitte ha comentado que, una vez que se active la operación de ingresos, se establecerán acuerdos de compra de energía que pueden durar hasta 20 años, con posibilidades de extenderse aún más.

El CEO ha afirmado que el inicio de operaciones no solo asegurará ingresos a largo plazo, sino que también permitirá a la empresa crecer y expandir sus capacidades en el futuro.