La UE considera un nuevo fondo para ayudar militarmente a Ucrania ante el veto de Hungría

La UE Busca Nuevas Alternativas para Ayudar a Ucrania

La situación en Ucrania sigue siendo crítica. Las tropas ucranianas enfrentan desafíos significativos en el campo de batalla, y el invierno se aproxima, lo que podría complicar aún más la vida de la población civil debido a los continuos ataques rusos a la infraestructura energética. En este contexto, la Unión Europea (UE) se encuentra en una encrucijada debido a la posición de Hungría, liderada por Viktor Orbán, que ha bloqueado el flujo de ayuda militar hacia el país invadido.

El Bloqueo de Hungría

Hungría ha mantenido en suspenso aproximadamente 6.000 millones de euros en reembolsos destinados a los Estados miembros por el apoyo que han enviado a Ucrania. Esta situación ha llevado a Bruselas a buscar formas alternativas de garantizar que la ayuda militar continúe fluyendo hacia Ucrania. Sin embargo, el obstáculo principal para la creación de un nuevo fondo de ayuda es la necesidad de unanimidad entre los Veintisiete, lo que incluye la aprobación de Hungría.

Propuestas en la Mesa

El Servicio de Acción Exterior de la UE está considerando la posibilidad de establecer un nuevo fondo intergubernamental que no dependa de la participación de Budapest. Este fondo se financiaría a través de aportaciones voluntarias de otros países miembros. Aunque la idea suena prometedora, la realidad es que, sin la aprobación de Hungría, la iniciativa podría no avanzar.

Los ministros de Exteriores de los Estados miembros se reunirán para discutir esta propuesta presentada por Josep Borrell, el jefe de la diplomacia europea. Esta reunión se llevará a cabo en Luxemburgo, y se espera que los líderes europeos analicen cómo pueden superar el obstáculo que representa el veto húngaro.

La Respuesta de Hungría

Hungría, bajo el liderazgo de Orbán, ha mostrado una postura firme en su oposición al apoyo militar a Ucrania. Este gobierno, considerado uno de los más cercanos al Kremlin dentro de la UE, no solo ha mantenido el fondo inoperativo, sino que también ha generado una considerable deuda con aquellos Estados miembros que han contribuido significativamente a la causa ucraniana.

La Historia de la Ayuda Militar

Desde el inicio de la guerra a gran escala en febrero de 2022, la UE rompió con uno de sus mayores tabúes al aprobar el envío de material militar a Ucrania a través de un fondo intergubernamental. Desde entonces, se han aprobado siete paquetes de ayuda, sumando alrededor de 3.500 millones de euros para material militar y 2.000 millones destinados a munición. Sin embargo, la situación actual ha llevado a la UE a considerar la creación de un nuevo fondo que podría facilitar la continuación de estos envíos.

Alternativas a la Unanimidad

El Servicio de Acción Exterior también ha explorado otras opciones, como declarar el envío de ayuda militar como un “caso particular” dentro de una política general de la UE. Si se opta por esta alternativa, no se requeriría la unanimidad de los Veintisiete, sino que se podría aprobar por mayoría. Sin embargo, esta opción ha generado ciertas dudas entre los servicios jurídicos europeos.

Un Respiro Financiero para Ucrania

Mientras tanto, la UE está ultimando un paquete de 35.000 millones de euros en forma de préstamo para Ucrania, que se financiará con los rendimientos de los activos estatales rusos que han sido congelados en territorio comunitario. Este paquete se considera esencial para que Kiev pueda abordar tanto necesidades militares como de reconstrucción y equilibrio fiscal. La propuesta es que este préstamo forme parte de un paquete más amplio de 50.000 millones de euros, en el que también participarían países del G-7, como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Japón.

Compromisos Internacionales

Aunque Reino Unido, Canadá y Japón se han comprometido a aportar 5.000 millones de euros, Estados Unidos ha condicionado su participación a que la UE modifique su sistema de congelación de activos rusos. Washington busca asegurar que estos activos permanezcan inmovilizados por un período más prolongado, posiblemente hasta 36 meses, para garantizar una mayor seguridad en el préstamo.

La Posición de Hungría

Hungría ha optado por no participar en la votación sobre este préstamo, argumentando que solo lo hará después de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, programadas para el 5 de noviembre. Esta postura deja a la UE en una posición complicada, ya que necesita avanzar con el préstamo de 35.000 millones de euros a un plazo de 35 años, el cual podría ser aprobado sin la unanimidad de los Veintisiete.

La Inestabilidad de los Activos Congelados

La situación actual con respecto a los activos estatales rusos, que ascienden a 20.000 millones de euros (la mayoría de los cuales se encuentran en Bélgica), se revisa cada seis meses. Este plazo es considerado demasiado corto por Estados Unidos, que depende en gran medida del visto bueno de Orbán, un líder que ha mostrado su cercanía con el Kremlin.

Esperanza en el Horizonte

A pesar de las dificultades, fuentes europeas indican que Estados Unidos no ha abandonado la idea de unirse al préstamo de forma urgente, incluso sin que se modifique el plazo de congelación de activos. La situación es tensa, pero la comunidad internacional sigue buscando maneras de apoyar a Ucrania en su lucha por la libertad y la soberanía.