La ONU alerta sobre el sufrimiento sin precedentes de civiles en Líbano tras un mes de ataques israelíes

La Situación Crítica en Líbano: Un Análisis del Sufrimiento Civil

Un Mes de Bombardeos y Desplazamientos

En Líbano, el sufrimiento de la población civil ha alcanzado niveles alarmantes tras casi un mes de intensos ataques israelíes. Más de 2,300 personas han perdido la vida, y aproximadamente 1.2 millones de ciudadanos han sido forzados a abandonar sus hogares, lo que representa un 20% de la población total del país. Jeanine Hennis-Plasschaert, la coordinadora de la ONU en Líbano, ha destacado la gravedad de la situación, comparando el impacto con el de la reciente invasión a Gaza.

Riesgo de Brote de Cólera

La Organización Mundial de la Salud ha emitido una advertencia sobre el alto riesgo de un posible brote de cólera en Líbano. Este riesgo se agrava por el desplazamiento masivo de personas y el deterioro de las condiciones sanitarias. Aunque actualmente Líbano no enfrenta una crisis humanitaria tan profunda como la de Gaza, el número de víctimas diarias debido a los ataques es comparable, oscilando entre decenas y un centenar.

Expansión del Conflicto

La coordinadora de la ONU ha señalado que la intensidad y el alcance de los intercambios de fuego se siguen expandiendo. Recientemente, se registró un bombardeo en una zona de mayoría cristiana en el norte del país, resultando en al menos 21 muertes, muchas de las cuales eran mujeres y niños. El ataque se dirigió a una casa alquilada que albergaba a personas desplazadas en Aitou.

Ataques en Nabatiye

El miércoles, se reportaron al menos 15 ataques en la ciudad de Nabatiye, en el sur de Líbano, que dejaron un saldo de 16 muertos, incluyendo al alcalde Ahmad Kahil. Este ataque ocurrió durante una reunión de la célula de crisis en un edificio municipal, lo que subraya la vulnerabilidad de las instituciones locales en medio del conflicto.

Zonas Desiertas y Presencia Militar

La situación actual ha llevado a que varias áreas, como el sur, el valle de la Becá y Dahiye, se encuentren casi desiertas. En el resto del país, las familias se trasladan con sus pertenencias, los comercios están cerrados y hay una mayor presencia de soldados en los puntos clave. Esta transformación del paisaje urbano refleja la inestabilidad y el miedo que ahora caracteriza la vida diaria en Líbano.

Ayuda Internacional

Francia ha respondido a la situación enviando 2.5 toneladas de ayuda médica de emergencia al ejército libanés, según un comunicado de su embajada en Beirut. Esta asistencia es crucial para mitigar los efectos de los ataques y el desplazamiento forzado de la población.

Protección de Civiles

Hennis-Plasschaert ha enfatizado la necesidad de proteger a los civiles y la infraestructura civil en todo momento. Ha declarado que las violaciones del derecho internacional humanitario son completamente inaceptables y que las soluciones militares no pueden garantizar la seguridad de ninguna de las partes involucradas en el conflicto. La Línea Azul, que separa a Israel de Líbano, no es reconocida como una frontera formal, pero es utilizada como referencia por la comunidad internacional.

Ataques a la Misión de Paz

La misión de cascos azules de la ONU en Líbano, conocida como Unifil, ha reportado un ataque “aparentemente deliberado” por parte del ejército israelí a una de sus posiciones en el sur del país. Un tanque Merkava disparó contra una torre de vigilancia, causando daños y destruyendo dos cámaras de seguridad. La misión ha lamentado este ataque, destacando que es un ejemplo más de la violencia que enfrenta la misión de paz.