La falsa psiquiatra de Puebla que prometía curar la depresión en siete días es descubierta y su consultorio es clausurado
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La Verdad Detrás de la Falsa Psiquiatra de Puebla
El Caso de Marilyn Cote
Marilyn Cote, abogada de Puebla, ha sido expuesta como una falsa psiquiatra que ofrecía tratamientos para la depresión en solo siete días. Usando un título falso, se hacía pasar por experta en salud mental, afirmando tener credenciales de universidades prestigiosas en Estados Unidos y los Países Bajos. Este engaño ha dejado a muchos pacientes vulnerables, poniendo en riesgo su salud mental.
Formación Académica y Falsificación de Credenciales
Cote se graduó en 2000 de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla como abogada. Doce años después, completó una maestría en Criminalística en el Colegio Libre de Estudios Universitarios. En 2015, según la Secretaría de Educación Pública (SEP), finalizó un doctorado en Psicología. Sin embargo, las cédulas que utilizaba para prescribir medicamentos psiquiátricos no correspondían a estas titulaciones, revelando su fraude.
La Denuncia de un Médico Joven
Mario, un joven médico frustrado por la proliferación de impostores en el ámbito médico, creó una cuenta en redes sociales llamada Charlatanes Médicos para alertar al público sobre los riesgos que representan estos falsos profesionales. Mario había denunciado a otros impostores, pero lo que descubrió sobre Cote fue alarmante.
La Investigación de Mario
Al recibir recetas de medicamentos psiquiátricos firmadas por Cote, Mario inició una investigación. Comenzó a recopilar información sobre ella, descubriendo que utilizaba un logotipo de su clínica, Neuropsychology Clinic Marilyn Cote, junto con emblemas de universidades como Harvard y Oslo. Además, firmaba como si fuera médico cirujano, psiquiatra y psicóloga clínica, utilizando cédulas falsificadas.
Información Engañosa en las Recetas
Las recetas encontradas contenían medicamentos como Q-Mind, un antipsicótico para la esquizofrenia, y otros como Neupax y Kastandi, utilizados para tratar trastornos depresivos. La inclusión de una dirección en San Diego y el nombre del doctor Rodrigo Aquilino, vinculado al Hospital General de Massachusetts, aumentó las sospechas sobre la autenticidad de Cote.
Reseñas Negativas y Denuncias
Durante cinco años, Cote acumuló reseñas negativas en Google, donde los pacientes advertían sobre su falta de profesionalismo. Muchos denunciaron que ofrecía diagnósticos sin fundamento y recetaba medicamentos sin tener la licencia necesaria. Un paciente, víctima de su estafa, afirmó haber perdido cerca de 1.000 dólares y presentó una queja ante la Comisión Nacional de Arbitraje Médico.
La Reacción de Fifty Doctors
El Fifty Doctors Hospital, donde Cote operaba, negó cualquier relación con ella y anunció acciones legales por el uso indebido de su nombre y logotipo. La situación se agravó cuando la Secretaría de Salud de Puebla clausuró su consultorio, citando que Cote no contaba con los permisos necesarios para ejercer la medicina.
La Falta de Regulación en el Sistema de Salud
El analista en política de salud, Xavier Tello, subrayó que el caso de Cote es solo la punta del iceberg en un problema más amplio. La falta de regulación en la validación de profesionales de la salud permite que personas sin credenciales adecuadas ejerzan la medicina sin repercusiones. Tello destacó que, aunque las autoridades pueden clausurar un consultorio, no existe un seguimiento efectivo para prevenir que estas personas continúen operando bajo nuevas identidades.
La Necesidad de una Reforma
La situación de Cote resalta la urgencia de una reforma en el sistema de salud. La falta de mecanismos de verificación adecuados permite que impostores continúen poniendo en riesgo la vida y salud de los pacientes. Tello enfatizó que otros países tienen leyes más estrictas que permiten arrestar a quienes ejercen la medicina con credenciales falsas, mientras que en su país, las consecuencias son mínimas.
Conclusiones
El caso de Marilyn Cote es un recordatorio de la importancia de verificar las credenciales de los profesionales de la salud. Los pacientes deben ser cautelosos y estar atentos a señales de advertencia, especialmente en su bienestar mental. La comunidad médica y las autoridades deben trabajar juntas para cerrar las lagunas legales que permiten que estas situaciones continúen ocurriendo.
