Kamala Harris se enfrenta a la falta de consenso sobre la definición de la práctica del aumento de precios en su plan para combatir la inflación

Kamala Harris y su Lucha Contra el Aumento de Precios

Un Plan Económico Detallado

Kamala Harris, la actual vicepresidenta y candidata presidencial demócrata, ha tomado la delantera en la lucha contra el aumento de precios. Esta semana, presentó un plan económico exhaustivo que incluye una promesa de combatir la especulación de precios, con el objetivo de reducir los costos de los alimentos para los votantes. La vicepresidenta había insinuado previamente la idea de una prohibición federal sobre este tipo de prácticas en agosto, lo que provocó críticas de figuras como el ex presidente Donald Trump, quien describió la propuesta como controles de precios “estilo soviético”.

Aunque Harris ha proporcionado más detalles en su plan de 82 páginas, aún no está claro qué aumentos de precios su administración consideraría como especulación ilegal.

La Preocupación por los Precios

Los precios altos y la responsabilidad de estos se han convertido en un tema central en la campaña presidencial. Los consumidores estadounidenses están frustrados por los altos costos de los alimentos, mientras que los minoristas se preparan para una temporada navideña donde se espera que los compradores busquen ofertas. Tanto Harris como Trump han presentado soluciones para abordar la inflación, mientras que los estadounidenses siguen enfrentando aumentos en sus facturas de alimentos, energía, vivienda y otros gastos cotidianos.

En el último año, los precios de los alimentos han aumentado solo un 1%, según la Oficina de Estadísticas Laborales. Sin embargo, los precios de los alimentos son un 25% más altos que en agosto de 2019, antes de que los problemas en la cadena de suministro y la inflación desataran un aumento de precios.

La Opinión Pública y el Papel del Gobierno

Los votantes tendrán que decidir qué papel deben jugar los líderes gubernamentales en la fijación de precios de las empresas. Los republicanos, en general, favorecen menos regulaciones económicas, aunque Trump ha sugerido limitar las importaciones de alimentos como una forma de reducir los precios de los productos de supermercado. Sin embargo, los economistas advierten que esta estrategia podría tener consecuencias negativas.

La idea de detener el aumento de precios es popular entre los votantes. Un sondeo realizado por The Economist/YouGov entre el 25 y el 27 de agosto reveló que el 60% de los adultos en EE. UU. apoyan establecer un límite a los aumentos en los precios de alimentos y productos de supermercado.

Desafíos en la Implementación de Legislación

Sin embargo, Harris se enfrenta a un camino difícil para aprobar cualquier legislación sobre la especulación de precios en el Congreso. Además, no está claro cómo funcionaría en la práctica una política que limite los aumentos de precios. Uno de los retos al acusar a las empresas de especulación es que el término tiene diferentes significados para diferentes personas.

Rakeen Mabud, economista jefe de la organización progresista Groundwork Collaborative, explica que la especulación de precios se define de dos maneras principales. La primera es una definición técnica utilizada por economistas y abogados, que se refiere a los aumentos de precios durante emergencias, como el aumento del precio del agua embotellada durante un huracán. Actualmente, 37 estados de EE. UU. tienen leyes que prohíben la especulación de precios en situaciones de emergencia.

Por otro lado, algunos consumidores y políticos utilizan una definición más amplia, refiriéndose a las empresas que cobran precios injustos simplemente porque tienen poder en el mercado, según Mabud.

La Teoría de la “Greedflation”

A medida que los precios de los alimentos y otros bienes aumentaron en 2021 y 2022, surgió una explicación popular: la “greedflation”. Esta teoría sugiere que las empresas empeoraron la inflación al aumentar los precios de sus productos sin ofrecer más a los clientes, como una mayor cantidad o un nuevo sabor. Lo que antes se consideraba una teoría marginal ha ganado apoyo general, incluido un estudio del Banco de la Reserva Federal de Kansas City, que encontró que los márgenes de ganancia contribuyeron “sustancialmente” a la inflación.

Sin embargo, muchos economistas, incluido el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, no creen que las ganancias corporativas sean la causa de la inflación. En cambio, atribuyen el aumento de precios a una variedad de factores, como el mercado laboral ajustado y los problemas en la cadena de suministro.

La Perspectiva de las Empresas

Independientemente de la definición de especulación, las empresas involucradas sostienen que no son responsables de los altos precios de los alimentos. Arun Sundaram, analista de investigación de acciones en CFRA Research que cubre empresas de alimentos y productos de consumo, señala que no ve evidencia de especulación en la industria de los supermercados. Según él, los aumentos de precios provienen de las empresas que trasladan algunos de sus costos de producción más altos a los consumidores.

Los márgenes de ganancia pueden aumentar por diversas razones y no son necesariamente un signo de avaricia corporativa o especulación. Pueden aumentar porque las empresas están operando de manera más eficiente o porque ha cambiado la mezcla de productos que venden.

Sin embargo, Sundaram menciona que puede haber cierto mérito en el debate sobre la industria de la carne, que ha enfrentado algunas demandas por fijación de precios. Por ejemplo, Pilgrim’s Pride Corporation, uno de los mayores productores de pollo del país, se declaró culpable en 2021 de conspirar para fijar los precios del pollo y trasladar costos a los consumidores.

Respuesta de la Industria Alimentaria

Incluso si Harris nunca logra aprobar una legislación sobre la especulación de precios, la resistencia a los altos costos ya ha comenzado a afectar los precios. Hasta ahora, la presión de los compradores y de los minoristas ha logrado hacer que algunos cambios sean evidentes.

Para abordar la frustración de los consumidores y las ventas más lentas, muchas empresas de alimentos están reintroduciendo descuentos. Sin embargo, los compradores no deben esperar ver una reducción de precios en todas las tiendas de comestibles.

Desde un punto de vista económico, hablar de deflación no es deseable, ya que es casi tan problemático como la inflación. Sin embargo, ha habido algunos ejemplos de empresas que han revertido aumentos de precios.