Joven de 24 años deja su trabajo en tecnología de seis cifras y se dedica a abrir ostras en eventos sociales
La Vida Después de la Tecnología: La Historia de una Joven que Shuckea Ostras
Un Cambio Inesperado
Hannah Chea, una joven de 24 años, ha vivido un cambio radical en su vida laboral. Recientemente, pasaba la mayor parte de su semana trabajando frente a una computadora como ingeniera de análisis de datos en Paramount. Sin embargo, su vida dio un giro inesperado cuando fue despedida en septiembre. Este despido no fue una sorpresa para ella, ya que lo había anticipado. A pesar de la incertidumbre, Chea decidió ver el lado positivo de la situación.
La Nueva Aventura de Hannah
En lugar de dejarse llevar por la tristeza, Chea se ha embarcado en una nueva aventura: shuckear ostras en eventos y fiestas. Este trabajo comenzó como un empleo a tiempo parcial hace un año, cuando lo descubrió en Instagram. Se inscribió y tuvo una conversación con el dueño de Oysters XO, una empresa de catering que opera en todo Estados Unidos. Aprendió no solo a shuckear ostras, sino también a entretener a los asistentes con datos interesantes sobre estos deliciosos moluscos.
Chea ha estado trabajando en uno o dos eventos al mes, dedicando entre dos y tres horas a shuckear ostras y mantener conversaciones animadas con los invitados. Ella describe esta experiencia como algo nuevo y emocionante. “Es una locura pensar que solo me dedico a shuckear ostras, ¡y en tacones!”, comenta con una sonrisa. La monotonía de su antiguo trabajo en tecnología la llevó a buscar algo diferente, y ahora se siente más extrovertida y feliz en su nuevo rol.
La Libertad de Ser Ella Misma
Ahora que ha dejado su trabajo en tecnología, Chea planea dedicarse más a su trabajo de shuckear ostras y ayudar a Oysters XO a crecer en el área de la Bahía, especialmente con la llegada de la temporada navideña. Aunque no revela cuánto gana en su nuevo trabajo, menciona que es “más de lo que esperaba” y que eso la ha sorprendido. Sin embargo, sus ingresos actuales no son suficientes para cubrir su alquiler, y mucho menos para igualar su antiguo salario de seis cifras.
A pesar de esta realidad, Chea se siente afortunada. Durante el tiempo que anticipó su despido, vivió de manera frugal y logró ahorrar aproximadamente un año de gastos de vida. Esto le ha dado la tranquilidad de no tener que apresurarse a encontrar un nuevo trabajo en tecnología. “He estado usando este tiempo para reflexionar sobre mi vida y lo que quiero hacer a continuación”, dice. La presión y el estrés que sentía en su antiguo trabajo han desaparecido, lo que le ha permitido disfrutar de una nueva libertad.
Mirando Hacia el Futuro
Chea está emocionada por la posibilidad de convertir su trabajo a tiempo parcial en una carrera a tiempo completo. “Por ahora, estoy muy feliz de tener la libertad para explorar”, dice. Reconoce que no todas las personas tienen la misma suerte que ella después de un despido, pero se siente agradecida por su situación. Desde que comenzó a compartir su experiencia en las redes sociales, ha recibido muchos comentarios de personas que se sorprenden al ver que no está triste ni sentada en casa lamentándose.