Estados Unidos enfrenta una paradoja de riqueza y pobreza en medio de la caída de la inflación y el crecimiento económico
La Economía de Estados Unidos: Una Mirada Alternativa a la Prosperidad y el Descontento
Introducción a la Realidad Económica
En el contexto actual, la economía estadounidense se presenta como un fenómeno contradictorio. A pesar de los últimos reportes que sugieren un crecimiento sólido y una disminución en las tasas de desempleo, existe un malestar social palpable entre los ciudadanos. Esta situación se intensifica a medida que se acercan las elecciones, donde la inflación se convierte en un tema central de discusión. En septiembre, la inflación se redujo al 2.4%, un cambio significativo desde el pico del 9.1% en junio de 2022. Sin embargo, este descenso no ha logrado calmar las inquietudes de la población.
El Crecimiento Económico Bajo Joe Biden
Desde que Joe Biden asumió la presidencia, la economía de Estados Unidos ha mostrado signos de robustez. Bajo su administración, la tasa de desempleo ha caído al 4.1%, una mejora notable desde el 6.3% que dejó su predecesor, Donald Trump, en 2017. Además, se ha observado un crecimiento constante en la creación de empleos, lo que ha llevado a que la bolsa de valores alcance niveles récord. Sin embargo, este crecimiento ha tenido un costo, ya que el déficit nacional ha aumentado debido a las medidas adoptadas para enfrentar la pandemia y la crisis energética.
La Paradoja del Descontento
A pesar de estos logros económicos, el descontento social persiste. La inflación, aunque ha disminuido, ha erosionado el poder adquisitivo de muchas familias. Desde 2016, los salarios han aumentado un 9.4%, pero la inflación ha superado este incremento, alcanzando más del 20%. Esto genera una sensación de que, a pesar de que la economía global parece ir bien, la situación personal de muchos se deteriora.
Los ciudadanos tienden a atribuir sus problemas económicos al gobierno actual, sin considerar las causas globales que contribuyen a la situación. Factores como la pandemia, el colapso de las cadenas de suministro y la crisis energética derivada de la invasión de Ucrania han influido significativamente en el aumento de precios. Sin embargo, la percepción de la población es que estos problemas son resultado de la gestión gubernamental.
El Impacto de la Inflación en el Hogar
El impacto de la inflación se siente de manera desigual entre los diferentes estratos sociales. Muchas personas se quejan de que, aunque la economía en general esté en crecimiento, sus bolsillos siguen encogiéndose. Esto provoca un sentimiento de malestar, especialmente cuando se observa que, aunque algunos hogares están mejorando su situación económica, muchos otros siguen luchando.
La comparación entre los índices de inflación bajo las administraciones de Trump y Biden revela diferencias significativas. Durante el mandato de Trump, la inflación se mantuvo relativamente estable, con un promedio del 1.6%. En contraste, Biden enfrentó un aumento drástico que alcanzó su punto máximo en 9.9%, aunque ahora ha logrado reducirlo a 2.4%. Sin embargo, la media de su mandato se acercará a 4%, notablemente más alto que su predecesor.
La Inflación Alimentaria: Un Problema Persistente
Uno de los aspectos más preocupantes de la inflación es el aumento en los precios de los alimentos. Estos han aumentado más de tres veces desde el inicio de la crisis. Este incremento es particularmente doloroso para las familias de menores ingresos, quienes destinan una mayor parte de su presupuesto a productos básicos. La crisis de la vivienda también ha contribuido a este descontento, ya que los precios han aumentado significativamente tanto bajo Trump como bajo Biden, con un incremento del 45% y 39%, respectivamente.
La Percepción de la Economía: Micro vs. Macro
La situación económica genera lo que se ha denominado la “paradoja del pesimismo económico.” Esto se refiere a la discrepancia entre la percepción de la economía a nivel macro (general) y micro (personal). Mientras que los datos económicos pueden mostrar un crecimiento, la experiencia cotidiana de muchos ciudadanos es diferente y, a menudo, negativa. Este fenómeno ha dado lugar a términos como “vibecession,” que combina las palabras “vibe” (vibración) y “recesión,” reflejando la sensación de incertidumbre generalizada.
La Confusión entre Inflación y Aumento de Precios
Un factor que contribuye a esta percepción errónea es la confusión entre la inflación general y el aumento de precios de productos específicos. La reducción de la inflación se refiere a la disminución de su tasa de crecimiento, no a una disminución de los precios en sí. Por ejemplo, aunque la inflación general haya bajado, los precios de los alimentos continúan aumentando, aunque a un ritmo más lento. Esto crea una sensación de que la situación económica sigue siendo precaria.