Empresas japonesas de chips dependen de ventas en China

La Dependencia de Japón en el Mercado Chino de Semiconductores

Aumento de Ingresos en China

Los proveedores de equipos de semiconductores de Japón han visto un crecimiento significativo en sus ingresos provenientes de China. Esto ocurre a pesar de la tensión existente entre Estados Unidos y China. Por ejemplo, Tokyo Electron, una de las empresas más grandes del sector, reportó que sus ingresos de China representaron el 44% de sus ganancias en el año fiscal que terminó en marzo de 2024, un aumento notable desde el 23% del año anterior. En el primer trimestre del año fiscal 2025, esta cifra casi alcanzó el 50%.

Por otro lado, Screen Holdings también experimentó un incremento en sus ventas desde China, alcanzando un 43% de sus ingresos totales en el mismo año fiscal, en comparación con el 19% del año anterior. Durante el primer trimestre del año fiscal actual, esta proporción subió al 51%. La empresa anticipa que para el año fiscal que culminará en marzo de 2025, el porcentaje de ventas provenientes de China se mantendrá en un 41%.

Desafíos para Japón

Este crecimiento en el mercado chino presenta un desafío para Japón, que debe equilibrar las exigencias de la Casa Blanca con sus propios intereses económicos. Estados Unidos ha implementado nuevas medidas de control de exportaciones, afectando productos relacionados con computación cuántica y semiconductores. Según un comunicado del Departamento de Comercio, estas restricciones buscan limitar el acceso de China a tecnologías avanzadas.

Los equipos que las empresas japonesas están vendiendo a China se utilizan principalmente para la producción de chips heredados. Estos chips son necesarios para aplicaciones como automóviles, en lugar de dispositivos más avanzados como smartphones o para entrenar modelos de inteligencia artificial.

Respuesta de China

Recientemente, China ha expresado su descontento con las restricciones impuestas por Japón. Según informes, Beijing ha amenazado con represalias si Japón continúa ampliando sus controles de exportación. Sin embargo, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, negó estas afirmaciones y afirmó que su país está comprometido con la estabilidad de la cadena de suministro global. También enfatizó que las medidas de control de exportaciones de China son “justas y razonables”.

Cuando Japón introdujo sus primeras restricciones en junio del año pasado, el Ministerio de Comercio de China calificó estas acciones como un “abuso de control de exportaciones” y una “seria violación de las obligaciones de la OMC”. Este tipo de tensiones entre las naciones ha aumentado en los últimos años, especialmente con la presión de Estados Unidos y sus aliados para limitar el acceso de China a tecnologías avanzadas.

Limitaciones en el Acceso a Tecnología

Un aspecto crítico de la situación actual es que China no ha podido obtener equipos de fabricación de chips de la empresa holandesa ASML, que es el único proveedor de herramientas capaces de fabricar algunos de los chips avanzados más necesarios. El gobierno de Países Bajos ha bloqueado las exportaciones de este equipo a China, lo que ha complicado aún más la situación.

A pesar de estas limitaciones, los analistas creen que China pronto podrá producir la mayoría de los chips que necesita para diversas aplicaciones. Desde el segundo trimestre de 2023, China ha incrementado sus compras de equipos de fabricación de chips. Según un informe de la organización de la industria SEMI, China adquirió aproximadamente 25 mil millones de dólares en equipos de chips en la primera mitad de 2024, superando la suma total de las compras de Estados Unidos, Corea del Sur, Taiwán y Japón combinadas.

El Futuro del Mercado de Semiconductores

El panorama del mercado de semiconductores está cambiando rápidamente. Las empresas japonesas están en una posición única, pero también enfrentan riesgos significativos. La dependencia de China para una parte tan grande de sus ingresos podría resultar problemática si las tensiones geopolíticas continúan aumentando. A medida que Estados Unidos refuerza sus controles de exportación, Japón deberá encontrar un equilibrio que le permita continuar beneficiándose del mercado chino sin comprometer su relación con Washington.