Desastre en Nova Kajovka afecta a comunidades

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La Crisis de la Presa de Nova Kajovka: Un Año de Consecuencias Devastadoras

Introducción a la Destrucción

Un año ha pasado desde que la presa de Nova Kajovka fue destruida, y las secuelas de este evento continúan afectando a la población local y a la agricultura. La acción de las fuerzas rusas, que hicieron estallar la presa el 6 de junio de 2023, provocó una inundación masiva en la región del río Dniéper. Esta catástrofe ha dejado a muchos sin acceso a agua potable y ha arrasado campos que antes eran productivos. La situación es desesperada para muchos, mientras que otros observan un cambio inesperado en el entorno natural.

Impacto Inmediato y Desplazamiento

La explosión de la presa liberó millones de litros de agua en cuestión de días, inundando 80 comunidades y afectando a cerca de 100,000 personas en las provincias de Jersón, Mikolaiv, Dnipropetrovsk y Zaporiyia. La ONU y el Gobierno de Ucrania han estimado que aproximadamente 3,000 personas perdieron sus hogares, y un millón de habitantes se quedaron sin agua potable. Además, 140,000 personas quedaron sin electricidad. Las pérdidas económicas se calculan en unos 13,000 millones de euros, con más de 5,000 millones destinados a la recuperación y reconstrucción.

La Nueva Realidad

A pesar de que la carretera que atraviesa la presa ha sido reparada, el dique sigue sin funcionar, lo que ha llevado a una grave escasez de agua. La vida diaria se ha transformado drásticamente para quienes solían depender de la presa. Un agricultor local, Oleksii Billeris, narra cómo la naturaleza ha tomado el control de las áreas que antes eran cultivadas. “Este pueblo, como otros, se nutría de las tuberías conectadas a una estación de bombeo, pero ahora están secas”, explica.

La Vida en el Campo

La vida en la región ha cambiado por completo. Los residentes, muchos de los cuales tienen gallinas, cerdos y otros animales de granja, se enfrentan a la dura realidad de la escasez de recursos. Una pareja de jubilados, que vive con solo 3,000 grivnas al mes (aproximadamente 67 euros), se vio obligada a gastar todos sus ahorros en la construcción de un pozo, que costó 20,000 grivnas (unos 450 euros).

La nostalgia por lo que fue la vida antes de la guerra es palpable. Billeris recuerda cómo los abuelos llevaban a sus nietos al embalse durante los veranos, llenos de vida y alegría. “La tragedia de este sitio es que antes de la guerra había vida”, lamenta.

Consecuencias Económicas

La economía local ha sufrido un golpe devastador. Antes de la guerra, los agricultores del sur de Ucrania cultivaban y exportaban sus productos a Europa. Sin embargo, la falta de irrigación ha hecho que la agricultura sea prácticamente imposible. Billeris enfatiza que la situación es insostenible, y muchos agricultores se ven obligados a buscar alternativas para sobrevivir.

Un Ecocidio en Marcha

La destrucción de la presa ha sido calificada de ecocidio por varias organizaciones debido a las graves consecuencias ambientales. El desbordamiento del embalse resultó en la muerte de 11,000 toneladas de peces, lo que representa pérdidas económicas de al menos cinco millones de euros. Además, las áreas inundadas han experimentado una grave contaminación.

Contaminación y Riesgos Ambientales

Los estudios realizados por Angurets y la ONG Clean Air han revelado altos niveles de cromo, arsénico y DDT, un insecticida prohibido que presenta serios riesgos para la salud. La situación es alarmante, ya que la contaminación del agua y el suelo podría tener repercusiones a largo plazo en la salud de los residentes y en el ecosistema.

La Presencia de Artefactos Peligrosos

Además de la contaminación, la explosión de la presa dejó al descubierto numerosos artefactos explosivos. A pesar de que ha pasado un año, las autoridades continúan encontrando entre dos y tres artefactos por semana, lo que representa un riesgo constante para los ciudadanos que intentan reconstruir sus vidas.

Un Ecosistema Inesperado

Sin embargo, no todo es desolación. Mijailo Mulenko, jefe del sector de protección de la naturaleza de la Reserva Nacional de Jórtitsia, ha observado un fenómeno sorprendente: la creación de un ecosistema único en Europa. A lo largo del último año, el área afectada ha experimentado un crecimiento inesperado de vegetación, con álamos y sauces que han comenzado a prosperar donde antes había agua.

Mulenko destaca la importancia del nuevo bosque para la purificación del aire contaminado en Zaporiyia. “El bosque desempeña una función valiosísima para limpiar el contaminado aire de la región”, afirma. Este cambio en el entorno natural ha llevado a algunos a considerar la posibilidad de preservar esta nueva forma de vida, a pesar de la devastación inicial.

La Promesa de Recuperación

El Gobierno ucraniano ha declarado que la presa será restaurada a su estado original una vez que termine la guerra. Sin embargo, tanto Angurets como Mulenko abogan por un enfoque que contemple las necesidades de todos los involucrados. La restauración de la presa podría ser una oportunidad para crear un equilibrio entre la recuperación económica y la preservación del nuevo ecosistema.

Lucía Ramírez

Soy Lucía Ramírez, reportera enfocada en Economía Global, Medio Ambiente y Bienestar. He viajado por el mundo analizando cómo las tendencias económicas afectan a diferentes culturas y ecosistemas. Mi trabajo en Versi busca dar voz a las historias menos contadas, aquellas donde la economía y el medio ambiente se encuentran con el bienestar humano, ofreciendo una visión global que conecta estos aspectos vitales de nuestra vida cotidiana.

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