Canadá refuerza su frontera con Estados Unidos ante las amenazas de Donald Trump

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Canadá se prepara para el impacto de las políticas de Trump

Canadá se prepara para el impacto de las políticas de Trump

A medida que se aproxima el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, Canadá se encuentra en un estado de alerta. Las autoridades canadienses han comenzado a reforzar la vigilancia en la frontera y han implementado cambios en sus políticas de inmigración debido a las posibles repercusiones de las políticas migratorias que Trump ha prometido aplicar desde su primer día en el cargo.

La amenaza de aranceles

El presidente electo ha dejado claro que planea imponer un arancel del 25% a todos los productos que ingresen a Estados Unidos desde Canadá y México. Esta medida busca frenar la inmigración irregular y combatir el tráfico de drogas, especialmente el fentanilo. Trump ha afirmado que ambos países tienen la responsabilidad de abordar estos problemas.

Respuesta de Ottawa

En respuesta a las amenazas de aranceles, funcionarios canadienses, incluida la viceprimera ministra Chrystia Freeland, han destacado la importancia de la relación entre Canadá y Estados Unidos. En un comunicado, afirmaron que ambos países mantienen una de las relaciones más sólidas en términos de comercio y seguridad fronteriza. Además, el primer ministro Justin Trudeau se comunicó con Trump para discutir estos temas, y la conversación fue considerada constructiva.

Preparativos en Canadá

Canadá ha estado preparando su estrategia ante el regreso de Trump desde hace semanas. Las autoridades canadienses iniciaron contactos con el equipo del presidente electo antes de las elecciones, buscando evitar sorpresas como las ocurridas en 2016. Desde entonces, se han abordado temas como el comercio y las responsabilidades de la OTAN, pero la inmigración se ha convertido en una prioridad.

Cambios en las políticas de inmigración

En los últimos meses, Canadá ha realizado cambios significativos en sus políticas de inmigración, incluyendo la reducción del número de trabajadores extranjeros temporales, así como de visas de estudiantes y residentes permanentes. El ministro de Inmigración, Marc Miller, ha señalado que no todos son bienvenidos en el país, lo que contrasta con el mensaje de apertura emitido en el pasado.

Aumento de la vigilancia fronteriza

La Real Policía Montada de Canadá ha declarado que está en alerta ante las promesas de deportaciones masivas de Trump. Las autoridades están considerando aumentar tanto el personal como los recursos para enfrentar cualquier eventualidad. El ministro de Seguridad Pública, Dominic LeBlanc, ha indicado que las agencias canadienses han estado trabajando en diversos escenarios y están preparadas para responder.

La situación en la frontera

Históricamente, la frontera entre Canadá y Estados Unidos ha sido considerada una de las más seguras del mundo. Sin embargo, la situación ha cambiado en los últimos años, observándose un aumento en el número de inmigrantes que cruzan de Canadá a Estados Unidos. En el año fiscal 2024, las autoridades estadounidenses detuvieron a casi 200,000 inmigrantes en la frontera canadiense, un aumento significativo en comparación con años anteriores.

Invasión desde Canadá

Miembros del equipo de Trump han comenzado a referirse a este fenómeno como una “invasión” de inmigrantes indocumentados que cruzan desde Canadá. Aunque no se han delineado planes específicos para abordar este flujo migratorio, el futuro “zar de la frontera”, Tom Homan, ha dejado claro que la inmigración desde Canadá será una prioridad para la administración republicana.

Cambios en el flujo migratorio

Durante años, la atención se centró en los inmigrantes que cruzaban hacia Canadá en busca de asilo debido a las políticas estadounidenses. Sin embargo, ahora la tendencia se ha invertido, y la mayoría de los cruces se realizan en dirección opuesta. Este cambio ha llevado a las autoridades canadienses a cerrar caminos irregulares, como el conocido camino Roxham, utilizado por miles de migrantes.

La respuesta de Quebec

La provincia de Quebec ha sido particularmente afectada por el aumento de solicitantes de refugio. El primer ministro provincial, François Legault, ha expresado su preocupación y ha indicado que no pueden permitirse una situación similar a la del camino Roxham. La policía provincial está trabajando en conjunto con la Real Policía Montada para fortalecer la vigilancia en la frontera.

Aumento del contrabando

El contrabando de personas desde Canadá ha aumentado en los últimos años, especialmente en las áreas fronterizas entre Ontario, Quebec, Nueva York y Vermont. Este fenómeno ha planteado preocupaciones adicionales sobre la seguridad, ya que las autoridades han detectado un mayor número de sospechosos de terrorismo en la frontera canadiense en comparación con la frontera sur.

Un acuerdo de cooperación

Desde hace dos décadas, Canadá y Estados Unidos mantienen un acuerdo denominado “tercer país seguro”. Este tratado establece que los solicitantes de asilo deben presentar su solicitud en el primer país al que lleguen, lo que significa que aquellos que intentan cruzar de un país a otro pueden ser devueltos, salvo algunas excepciones. A pesar de las tensiones, las autoridades canadienses han subrayado que la cooperación con Estados Unidos en temas de seguridad fronteriza seguirá siendo una prioridad.

Mensaje de calma desde Ottawa

A pesar de la creciente preocupación por las políticas de Trump, el gobierno canadiense intenta transmitir un mensaje de calma. Las autoridades han enfatizado que existe un interés compartido en garantizar la seguridad de la frontera y que seguirán trabajando en conjunto con sus homólogos estadounidenses.

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