El nuevo presupuesto del gobierno aumenta la presión sobre Pemex al reducir financiamiento y exigir más producción
Desafíos Financieros y Productivos de Pemex
La situación de la petrolera estatal Pemex se encuentra en un punto crítico, donde las dificultades financieras se suman a la presión por aumentar la producción. El nuevo presupuesto presentado por el Gobierno de Claudia Sheinbaum plantea un reto significativo, ya que reduce los recursos asignados a Pemex en un 7,5% y, al mismo tiempo, establece la necesidad de incrementar la producción en un 9%.
Presupuesto y Producción: Un Duro Desafío
El Paquete Económico de la Secretaría de Hacienda establece que Pemex debe alcanzar una producción de 1,89 millones de barriles diarios. Esta meta es ambiciosa, considerando que la última vez que se lograron cifras similares fue a principios de 2018. Actualmente, la producción de la empresa estatal se sitúa en un promedio de 1,71 millones de barriles diarios, cifra que incluye hidrocarburos condensados. Sin embargo, si se excluyen estos condensados, la producción diaria cae a 1,45 millones de barriles, el nivel más bajo en 45 años.
Recursos Financieros en Caída
El Gobierno federal ha decidido destinar a Pemex alrededor de 464.255 millones de pesos en 2025, lo que representa una disminución frente a los más de 481.000 millones de pesos asignados en el presente año. Los fondos se utilizarán para la extracción, refinación, venta y otros procesos relacionados con los hidrocarburos. Sin embargo, la asignación de recursos no será suficiente para cubrir la abultada deuda de la empresa, que asciende a aproximadamente 9.000 millones de dólares en 2025.
Aunque se espera que Pemex reciba 136.000 millones de pesos para afrontar sus compromisos financieros a corto plazo, estos recursos no contribuirán a la expansión de la producción. El compromiso del Gobierno de apoyar a Pemex está condicionado a que la empresa logre mejorar su balance financiero y reduzca su deuda pública.
Inversión y Producción: Un Ciclo Vicioso
La reducción del 15% en los proyectos de inversión de Pemex, que caerán de más de 248.000 millones de pesos a 209.000 millones de pesos, plantea un riesgo significativo. La falta de inversión podría resultar en una menor perforación de pozos, dificultando alcanzar la meta de incremento en la producción de crudo.
Luis Miguel Labardini, experto en energía, señala que es crucial implementar esquemas de producción mixta que permitan la inversión del sector privado. Esto podría ser una solución viable para expandir las inversiones en exploración y producción, dado que Pemex tiene el potencial, pero carece de los recursos necesarios.
Análisis del Presupuesto y Proyecciones Futuras
Un análisis realizado por BBVA México indica que, aunque la meta de producción es alcanzable, se requiere que Pemex materialice sus inversiones en colaboración con el sector privado. Si la empresa no realiza un cambio significativo en su modelo de negocios, seguirá limitando el espacio fiscal del gobierno en los años venideros.
La administración de López Obrador había inyectado casi un billón de pesos a Pemex para estabilizar sus finanzas. Sin embargo, ahora, bajo la dirección de Sheinbaum, la petrolera busca reducir una deuda que supera los 97.000 millones de dólares y recuperar una producción de 1,8 millones de barriles diarios.
Plan de Austeridad y Reingeniería Fiscal
El plan de Pemex incluye una reingeniería fiscal y un enfoque en la austeridad, con el objetivo de generar ahorros de 50.000 millones de pesos. Esto implica que la empresa pasará de pagar múltiples impuestos a un solo tributo, conocido como Derecho Petrolero para el Bienestar.