Angela Merkel enfrenta el desafío de su legado mientras se prepara para lanzar sus memorias
Merkel en la Encrucijada: Reflexiones sobre su Legado
El pasado 25 de septiembre, la Academia de las Ciencias de Berlín y Brandeburgo fue el escenario de un evento singular. Angela Merkel, quien fue canciller de Alemania entre 2015 y 2021, celebró su 70 cumpleaños. Aunque su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), quiso rendirle homenaje, el evento estuvo marcado por un ambiente de distanciamiento. La celebración fue más un reconocimiento tímido y medido. El semanario Die Zeit lo describió como un “acercamiento de puntillas”, reflejando la compleja relación entre Merkel y su partido, que busca recuperar el poder tras cuatro años en la oposición.
La Doble Cara del Legado de Merkel
Durante su mandato, Merkel fue reconocida como una figura clave en la política europea. Ganó cuatro elecciones consecutivas y se mantuvo en el poder durante 16 años, contribuyendo a la unidad en Europa en tiempos de crisis. Sin embargo, su legado está siendo revisado y cuestionado. La percepción de su gestión ha cambiado, especialmente desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia el 24 de febrero de 2022, que tambaleó las bases de la política alemana y europea.
Merkel, la primera mujer en ocupar el cargo de canciller y proveniente del este de Alemania, se encuentra en una especie de purgatorio político. A pesar de haber sido celebrada como una estadista al dejar el cargo, su legado se reinterpreta a la luz de los acontecimientos recientes. La CDU, bajo el liderazgo de Friedrich Merz, un antiguo rival de Merkel, parece distanciarse de su figura. Merz, quien ha estado en desacuerdo con Merkel durante más de dos décadas, representa una nueva era para la CDU, reflejando un intento de desmarcarse de las políticas de la excanciller.
La Migración y la Energía Nuclear: Puntos de Controversia
Uno de los temas más debatidos en la política de Merkel es su política migratoria. En 2015, tomó la decisión de permitir la entrada de un millón de refugiados en Alemania, un acto visto por muchos como un símbolo de humanitarismo. Sin embargo, esta política ha sido utilizada por sus oponentes como un ejemplo de lo que salió mal en su gestión. La CDU y el Partido Socialdemócrata (SPD), que gobernó junto a ella, han comenzado a distanciarse de estas decisiones.
El abandono de la energía nuclear tras el accidente de Fukushima en 2011 también es un punto de controversia. Aunque Merkel fue vista como una líder que priorizaba la seguridad y el bienestar, sus decisiones han sido objeto de críticas. Horst Seehofer, un antiguo ministro, ha señalado que la decisión de 2015 sobre la migración contribuyó al ascenso de la extrema derecha en Alemania, un fenómeno que antes era marginal.
La Revisión Histórica de su Mandato
El autor Ekhart Lohse, en su libro “Die Täuschung”, argumenta que la percepción de Merkel y su legado cambió drásticamente después de la invasión rusa de Ucrania. Este evento hizo que tanto los partidarios como los críticos comenzaran a cuestionar qué salió mal durante su tiempo en el poder. Lohse sugiere que Merkel se esforzó por preservar a Alemania de un mundo turbulento, pero no hizo lo suficiente para transformarla. La aparente estabilidad que disfrutó Alemania durante su mandato fue, según Lohse, una ilusión que se desvaneció rápidamente.
La Alemania Posmerkeliana
Hoy en día, Alemania se encuentra en una situación complicada. Con una economía estancada y una coalición de gobierno dividida, el país lidia con problemas, desde retrasos en el transporte público hasta crisis en diversas industrias. Los críticos apuntan a que Merkel, con su enfoque pragmático y su aversión a tomar riesgos, anestesió a la nación. Un político de centroderecha ha comentado que, aunque la década de 2010 fue un período de crecimiento, se desaprovecharon oportunidades importantes.
Lohse también señala que la relación entre Merkel y el pueblo alemán es más compleja de lo que parece. No fue solo Merkel quien creó esta ilusión de estabilidad; toda la nación participó en este teatro. A pesar de sus logros, Merkel nunca enfatizó su origen en la Alemania del Este, lo que podría haber generado una conexión más profunda con los ciudadanos de esa región. En su intento por encajar en un sistema dominado por la Alemania occidental, evitó abordar las dificultades de la reunificación.