La dana causa daños millonarios en el campo, pero menos que la sequía y granizo de 2023

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La Devastación de la Dana en el Campo Español

La Devastación de la Dana en el Campo Español

La reciente tormenta que azotó el sureste de España ha dejado una estela de destrucción en el campo. Aunque los daños son significativos, se estima que no alcanzarán los 1.240 millones de euros reportados el año pasado debido a condiciones climáticas adversas. La Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados (Agroseguro) ha indicado que, a pesar de la intensidad del fenómeno, las pérdidas podrían ser menores.

El Impacto de la Tormenta

La tormenta, considerada la peor del siglo, ha atravesado regiones como Valencia, Albacete, Murcia y Andalucía. El paisaje resultante es un mar de agua y lodo donde los cultivos han quedado casi irreconocibles. Las asociaciones agrícolas han reportado consecuencias devastadoras: cosechas arruinadas, árboles inundados, caminos destruidos y sistemas de riego inoperantes.

Las comarcas de Plana de Utiel-Requena, Hoya de Buñol, La Ribera Alta y La Ribera Baixa han sido las más afectadas. En estas áreas, el agua cubre hectáreas de cosechas de cítricos, caquis y hortalizas. La situación es crítica, y aunque los daños están en evaluación, los analistas creen que no se superarán las cifras del año anterior.

La Opinión de los Expertos

Manuel Alcaide, técnico de Coag, ha expresado que los daños son, en este momento, incalculables. La magnitud de la destrucción es tal que los campos están prácticamente sumergidos. En las comarcas de La Ribera, donde la cosecha de caquis apenas había comenzado, se estima que el 85% de la producción ha quedado inutilizable. Esto se suma a las pérdidas en los cítricos, que podrían ser igualmente graves.

Los sistemas de riego, vitales para la agricultura en la región, han sufrido daños severos. Esto, junto con la destrucción de caminos rurales y almacenes, ha dejado a los agricultores en una situación de incertidumbre. La dificultad para acceder a los campos y evaluar los daños se complica aún más por cortes de comunicación en áreas rurales.

La Realidad de los Productores

Ricardo Bayo, secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en la Comunidad Valenciana, ha señalado que muchos agricultores aún no han podido llegar a sus campos. Esto significa que se necesitarán varias semanas para tener una imagen clara del impacto total de la tormenta.

Ignacio Machetti, presidente ejecutivo de Agroseguro, ha reconocido que este evento superará las danas de años anteriores. Sin embargo, está convencido de que las pérdidas no alcanzarán los niveles del año pasado, que fue el más devastador en la historia del campo español. Machetti ha subrayado que, aunque la sequía ha persistido en algunas áreas, no ha afectado a todo el territorio de la misma manera.

La Crisis que Se Avecina

A medida que el agua comienza a retroceder, los agricultores se enfrentan a una dura realidad. Las posibles ayudas que puedan recibir podrían llegar demasiado tarde para compensar las pérdidas. Para muchos, esta catástrofe no solo implica la pérdida de una cosecha, sino que representa una amenaza para su modo de vida y la cultura agrícola de la región.

Alcaide ha enfatizado que, en un entorno de minifundio, el impacto es aún mayor para los pequeños agricultores que ya tenían poco margen de ganancia antes de la tormenta. Los analistas han indicado que, en las áreas más afectadas, un 50% de los recolectores de naranja y un 90% de los de caqui están asegurados, pero el resto enfrenta un futuro incierto sin ayudas garantizadas del Gobierno.

Urgencia en la Respuesta

Bayo ha detallado que las organizaciones agrarias han tenido reuniones con la consejería para discutir la urgencia de atender las necesidades más apremiantes. Se ha enfatizado la importancia de garantizar que las explotaciones ganaderas cuenten con alimento para sus animales y la necesidad de reparar los caminos para facilitar el acceso a las fincas.

Además, han solicitado ayudas para los agricultores no asegurados, con el fin de cubrir, al menos parcialmente, las pérdidas. La consellería ha mostrado disposición a explorar opciones, aunque ha reconocido que los recursos son limitados. La coordinación con el Gobierno de España está en marcha, y se espera que estas ayudas se implementen pronto.

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