Aumento de Costos de Atención Médica: Lo Que Debe Saber Durante la Inscripción Abierta

Un Aumento Significativo en Costos

Los costos de la atención médica en Estados Unidos han alcanzado un máximo histórico tras la pandemia. Este aumento ha llevado a muchos empleadores a reconsiderar sus ofertas de beneficios y cómo pueden ayudar a sus empleados a manejar estos gastos. Durante la temporada de inscripción abierta, que generalmente se extiende hasta principios de diciembre, es crucial que los trabajadores analicen las opciones disponibles.

La Realidad Económica de los Empleados

Aproximadamente 165 millones de estadounidenses obtienen su seguro de salud a través de su trabajo. Sin embargo, muchos de ellos no dedican suficiente tiempo a evaluar las opciones que les ofrece su empleador. Un estudio de Aon reveló que, en promedio, los empleados solo pasan 45 minutos al año eligiendo los beneficios que más les convienen. Este tiempo es claramente insuficiente, especialmente dado el aumento constante de los costos de salud.

Proyecciones de Aumento de Costos

Según un informe de WTW, una firma de consultoría, los empleadores estadounidenses anticipan que sus costos de atención médica aumentarán un 7.7% en 2025, en comparación con un 6.9% en 2024 y un 6.5% en 2023. Esta tendencia al alza indica que los empleadores están explorando nuevas estrategias para ajustar sus planes de salud. De hecho, el 52% de las empresas planea implementar programas para reducir costos totales y muchas otras están considerando redirigir a sus empleados hacia proveedores y lugares de atención más económicos, lo que podría resultar en una red más limitada de médicos.

El Impacto en los Empleados

Los costos de atención médica son una carga significativa para los trabajadores. En promedio, los empleados son responsables de más de $6,200 del costo total de las primas familiares de seguro de salud, que han aumentado un 7% este año, alcanzando un promedio de $25,572. Este aumento en los costos ha llevado a que aproximadamente un 34% de los empleadores planeen trasladar parte de esos costos a sus empleados a través de primas más altas o copagos incrementados en planes de salud de alto deducible.

Estrategias para Manejar Costos

Para ayudar a los empleados a manejar estos gastos, es recomendable que consideren sus opciones durante la inscripción abierta. Los empleados a menudo se enfrentan a dos tipos de planes de seguro médico: uno con un costo mensual más alto (prima) y un deducible más bajo, y otro con costos de bolsillo más altos pero primas más bajas. La elección entre estos planes debe basarse en el historial médico y las necesidades de atención médica de cada familia.

Evaluación de Necesidades

Gary Kushner, un experto en diseño y gestión de beneficios, sugiere que los empleados se pregunten: “¿Soy una familia de bajo, medio o alto reclamo? ¿Tuve un incidente que requirió atención aguda o solo atención preventiva?” Si un empleado solo visita al médico una vez al año, podría ser más beneficioso optar por un plan de alto deducible con una prima mensual más baja.

Utilizando Cuentas de Ahorro de Salud (HSA)

Además de los planes de salud, más del 50% de los empleadores también ofrecen cuentas de ahorro de salud (HSA), que pueden ser útiles para cubrir gastos adicionales de atención médica. Para calificar para una HSA, se debe tener un plan de salud de alto deducible. La IRS define “alto deducible” como al menos $1,650 para planes individuales o $3,300 para cobertura familiar en 2025.

Límites de Contribución y Ventajas Fiscales

El límite de contribución para una HSA en 2025 será de $4,300 para individuos y $8,550 para familias. Las contribuciones a una HSA crecen de manera libre de impuestos y pueden utilizarse para gastos de bolsillo, incluidas visitas al médico y medicamentos recetados. Esto convierte a las HSA en una red de seguridad clave para gestionar gastos médicos en aumento.

Opciones de Seguro de Vida y Discapacidad

Durante la inscripción abierta, los empleados también pueden considerar opciones de seguro de vida y discapacidad. Las pólizas de seguro de vida emitidas por el empleador generalmente equivalen a un año de salario, y los empleados pueden optar por comprar seguros de vida suplementarios a través de su trabajo. En cuanto al seguro de discapacidad, existen dos tipos principales: el de corto plazo, que reemplaza entre el 60% y el 70% del salario base, y el de largo plazo, que generalmente comienza a pagar después de tres a seis meses y reemplaza entre el 40% y el 60% del ingreso.

Evaluando Necesidades de Cobertura

Es fundamental que los empleados evalúen cuánto seguro necesitan para proteger a sus dependientes. Esto puede implicar decidir si desean comprar cobertura adicional a través del plan grupal de su empleador o buscar su propia póliza. Muchos asesores recomiendan esta última opción para asegurarse de que se tiene la cobertura adecuada.

Consideraciones de Bienestar

Los beneficios adicionales, aunque opcionales, son cada vez más relevantes, especialmente en lo que respecta al bienestar. Antes de la inscripción abierta, casi 1 de cada 5 empleados reportó un deterioro en su salud mental. Tom Kelly, un experto en salud y beneficios, señala que los empleadores están cada vez más interesados en abordar las necesidades amplias de su fuerza laboral. Esto se traduce en un aumento de iniciativas de bienestar que pueden incluir:

• Coaching financiero

• Clases de manejo del estrés

• Descuentos en equipos de gimnasio

• Asistencia para matrícula

• Programas de pago de préstamos estudiantiles

• Cuidado infantil de respaldo

• Estipendios para programas de enriquecimiento y campamentos

Estos beneficios pueden contribuir significativamente al bienestar a largo plazo de los empleados. Aunque son voluntarios, están ganando importancia en la propuesta de valor que los empleadores ofrecen a sus trabajadores.