Austria enfrenta incertidumbre política tras victoria del partido ultraderechista FPÖ y el rechazo a Herbert Kickl como canciller

Austria se Enfrenta a la Incertidumbre Política Tras las Elecciones

La reciente victoria del Partido de la Libertad (FPÖ) en Austria ha dejado al país en una fase de incertidumbre política. Con un 29,2% de los votos, el partido ultra, liderado por Herbert Kickl, se encuentra en una posición complicada. A pesar de su éxito en las urnas, el líder radical se enfrenta al rechazo de otros partidos que no desean verlo como canciller. Esto plantea serias dudas sobre cómo se formará el nuevo gobierno.

La Rechazada Candidatura de Kickl

En la noche electoral, los otros partidos políticos fueron claros en su postura. Nadie está dispuesto a colaborar con Kickl, a quien consideran demasiado radical. Este rechazo generalizado ha dejado a Kickl en una posición aislada. A pesar de que los resultados ofrecen varias posibilidades de coaliciones, se anticipa que las negociaciones podrían extenderse por varios meses.

El Desplome de los Democristianos

El Partido Popular Austriaco (ÖVP), que sufrió una caída significativa al obtener solo el 26,5% de los votos, ahora se encuentra en una situación delicada. El actual canciller, Karl Nehammer, tiene la oportunidad de continuar en su cargo, pero debe navegar en un entorno político complicado. Aunque ha rechazado a Kickl por sus “teorías conspiranoicas”, Nehammer no ha cerrado la puerta a un posible acuerdo con el FPÖ, aunque esto podría generar descontento entre sus propios seguidores.

Posibilidades de Coalición

A pesar de las tensiones, Nehammer y Kickl podrían formar una mayoría clara en el parlamento, con un total de 108 escaños de un total de 183. Ambos partidos comparten intereses en temas como la política migratoria y la economía. Sin embargo, el FPÖ persiste en su deseo de que Kickl sea el canciller del pueblo, lo que complica aún más cualquier posible acuerdo.

Mirando Hacia el SPÖ

Para fortalecer su posición, el ÖVP está considerando una alianza con el Partido Socialdemócrata (SPÖ), que ha obtenido un 21% de los votos, marcando su peor resultado histórico. El líder del SPÖ, Andreas Babler, ha mostrado cierta apertura hacia los conservadores, pero dentro de su partido hay divisiones que podrían obstaculizar cualquier avance. Recientemente, el SPÖ ha formado un equipo para llevar a cabo conversaciones exploratorias, aunque esto no garantiza que se inicien negociaciones formales.

La Complejidad de las Negociaciones

La situación es compleja y delicada. Kickl debe decidir si se retira o si intenta mantener su candidatura, lo que podría complicar aún más la formación de un gobierno. La posibilidad de una gran coalición entre el ÖVP y el SPÖ está en el aire, pero también está ganando fuerza la idea de un tripartito, que incluiría a los liberales de Neos, quienes han obtenido un 9% de los votos.

El Reto de la Formación del Gobierno

Con tantas opciones sobre la mesa, las conversaciones para formar un nuevo gobierno en Austria se presentan como un desafío. Históricamente, el país ha tomado un promedio de dos meses para cerrar coaliciones, aunque en el pasado se han dado casos como el del ÖVP y Los Verdes, que tardaron más de cien días en llegar a un acuerdo en 2019.

Expectativas del Presidente

El presidente de Austria, Alexander Van der Bellen, ha comentado que encontrar una solución podría llevar tiempo, pero considera que es un tiempo bien empleado. En su segundo mandato, Van der Bellen ha expresado que no está dispuesto a favorecer a un partido que no respete los valores europeos ni condene la guerra en Ucrania. Esta semana, comenzará una serie de entrevistas con los líderes políticos para explorar posibles compromisos.